La televisión mi peor enemiga

Siempre me sentí discriminada, desde la primaria hasta ahora, la Universidad.

“La vida moderna de Rocco”, “Dragon Ball Z”, “Las chicas superpoderosas”, “Johnny Bravo”, “Pokémon”, “Dexter”, “La vaca y el pollito”, y así podría seguir nombrando. Esos nombres sonaron en mi vida desde que tengo memoria, mis compañeros y amigos los veían después del colegio, en la merienda y al otro día jugaban y comentaban el capitulo; Mientras tanto yo…yo le rogaba a papá que ponga cable en casa. Todo lo bueno estaba en la TV por cable! Pero él insistía en que si me peleaba con mi hermana con 5 canales, con más de 100 seria una batalla campal.

Los domingos eran días grandiosos, mi tío nos esperaba para merendar. Nunca faltaba la chocolatada, las vainillas y, por supuesto, la TV puesta en Cartoon Network. Felicidad. Las tardes con mi tío eran geniales, me empachaba de vainillas y dibujitos. Nada mejor para contarles el lunes a mis compañeros (en ese entonces, los lunes eran buenos).

Cris Morena…AY! Cris Morena, gracias por pasar “Chiquititas” por canales de aire. Belén Fraga era mi favorita, soñaba ser como ella y abrir la ventana de los sueños donde todo se cumplía. Es mas…si no recuerdo mal, hasta le pedí a mama ser huérfana, en “Chiquititas” todo era mágico. Que delirio!

“Cebollitas subcampeón, Cebollitas subcampeón…”, otra vez papá enojado. Mis tardes mirando “Cebollitas” eran todo el deporte que hacia. El equipo, siempre quise el equipo para vestirme como ellos pero papá decía que era de hombre. A él ni le gusta el fútbol!

Cris Morena creo sueños, deseos y esperanzas en mí, ese 10 de diciembre de 2000 iban a pasar un especial en la TV, lo esperaba con ansias mientras armaba el árbol de navidad. La TV encendida y de golpe…la transmisión cortada, un flash de último momento decía que el presidente se iba en un helicóptero. Mamá preocupada. El noticiero mostraba puro desastre, la gente corría, Plaza de Mayo era un caos, mamá llamaba a papá para que viniera del trabajo. Yo quería ver “Chiquititas”.

Odiaba los noticieros, mi nonna me los hacia ver siempre, por suerte era el de canal 9 donde siempre había osos pandas que fueron rescatados.

Acostumbrándome a los “Último momento” y las interrupciones de Cadena Nacional, que no podía cambiar, fui creciendo y despegándome de la televisión, aunque los viernes y sábados era imposible no mirarla, disfrutaba de hermosas noches de películas de acción con papá; Sylvester Stallone quedaba diminuto al lado de él.

Ahora si, en el 2013, ni los viernes quedan de TV. Virginia Lago pasa las peores películas. No hay ni una piña, ni un tiro, solo amor y sufrimiento. Películas para madres.

Mis amigos se siguen riendo, en un mundo donde se puede mirar TV hasta por el celular, yo sigo sin cable.

Gracias Internet! Ayudas a que la discriminación hacia mi sea menor. Las series ya no las espero tiempo indeterminado hasta que la pasan por algún canal de aire. Cargar y reproducir, esa es mi relación ahora con la TV.

Por Anahí Boragnio